Relatos

De Rodiles a Tazones con compañía…

Lugar: Rodiles-Tazones

Aprovechando la fiesta del Pilar, Fernando Alonso y yo nos citamos a las 11 en Rodiles para nadar hasta Tazones y volver (4.400 m.). Invitamos también a amigos de las travesías (Tana, Nacho López, Kimbo, Pompe, Vic López, Javier Nuño, Tino, Jony,...), pero son fiestas muy familiares y al final salimos solos.
Yo reconozco que dormí inquieto pensando en qué pronóstico tendría razón, si el de olas de 0,7 m. ó el de 1,3; si el de agua a 22º ó el de 18º. Pues bien, la mar estaba como un plato, salvo lo habitual en la salida, en la zona del acantilado, con corrientes, olas con surferos y bastante fresca el agua.
Fer, a pesar de estar desentrenado y de arrastrar una boya para que nos vieran, impuso su ritmo y siempre fue un "cacho" por delante.
Llevábamos ya 20 minutos cuando noté un pinchazo en un tobillo. Pensé: está muy fría para que haya medusas. La segunda me pilló en la espalda, la tercera en la frente… Fue cuando empecé a verlas. La verdad es que eran pequeñas y muy monas. ¿Habéis visto las pelis de submarinos, que van sorteando minas ancladas a distintas profundidades?, pues eso fui haciendo el resto del trayecto.
Fer optó por acelerar el ritmo para llegar cuanto antes. Yo no sabía qué hacer porque había tantas que no se podían esquivar. Fue como esas noches de verano, cuando harto de abofetearte tratando de aplastar los mosquitos contra tu cara, desistes y dejas que te coman vivo.

Al llegar a Tazones (unos 33 minutos, yo un par de ellos más), ví que Fer estaba abrasado, con marcas muy serias por el pecho, por la espalda.
Un ATS valenciano se ofreció a ponerle una inyección de Urbasón y le tapó con una manta térmica, porque empezó a tiritar sin control. Llamamos a una ambulancia que nos llevó al Centro de Salud de Villaviciosa. Allí pusieron durante una y media cataplamas a Fer, mientras yo iba en taxi a buscar a su mujer y a su hijo a Rodiles, que esperaban que llegásemos a la playa por mar. Pobre, vaya agobio, con unos prismáticos tratando de vernos en el mar y llego sólo, por tierra, sin su marido y lleno de latigazos.
Concluímos que hay que llevar siempre una lancha de apoyo que nos saque en caso de problemas, pero lo demás fue una experiencia maravillosa: Nadar con amigos sin más objetivos competitivos que disfrutar del deslizamiento por el agua en la naturaleza.

Por supuesto, Fer y yo somo ahora más amigos, si cabe.
Ya estoy pensando en la siguiente.

Manuel Palanco.
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Medio Ironman de Augusta

Lugar: Georgia (EE.UU.)

La salida fue escalonada en olas de 100 a 250 personas cada 4 minutos (3.000 participantes en total). A mí me tocó salir a las 8:16 de la mañana así que sobre las 7:45 visité el baño por última vez y me puse el traje de neopreno. Aquí hay que decir algo; lo del triatlón es duro y en general los triatletas están en muy, muy buena forma. Pero para un traje de neopreno en agua de 23 grados hay que ser triatleta o espaldista (u otra variedad de nenaza cualquiera). Hice los 1.900 metros en 23 minutos pero claro, con un traje de triatleta que te hace levantar sobre el agua cuan Mesías y en un rio con la corriente a favor, no hay que ser David Meca para sacar una media de 1:12 el 100.
Tardé más de 5 minutos en la primera transición, en parte debido a los nervios pero sobre todo porque había que correr descalzo desde la salida del agua hasta el área de transición lo que parecía una eternidad. Aquello era más largo que el San Silvestre de Pola de Lena. Cogí la bici y empecé a rodar suave para no desmadrarme con tanta adrenalina (los que me conocen saben que no sería la primera vez que me pase de revoluciones). El sol se estaba escondiendo (de momento) detrás de las nubes y me sentí muy fuerte así que fui aumentando el ritmo con cada kilómetro. A falta de 3 km para acabar los 91 km de la parte de bici, estaba muy cansado de la postura (espalda sobre todo) y no sabía que me apetecía menos; seguir rodando en la bici (a una media de 33 km/hr) o empezar un medio maratón a pié. Al final me obligaron a decidir así que…
La segunda transición fue algo más fluido y sólo tarde 3 minutos en empezar la carrera. Me encontré con un Costarricense que iba más o menos a mí ritmo y me uní a él para hacer un poco más llevadero el asunto. Me dijo que quería ir a ritmo de 6 minutos/km y yo, todo chulo, pensé para mí que tarde o temprano le tendría que dejar atrás ya que tenía mayores expectativas para esta carrera (5'30"/km). ¡Bendita ilusión! A los 3 km empezó a cascar un sol de justicia que poco a poco iba minando las fuerzas de todos y todas (espaldistas inclusive). A los 10 km me di cuenta de que aquello de los 5 minutos y medio era un bonito sueño y que me tendría que adaptar a la realidad de la situación. Con 32 grados en el termómetro y 90% de humedad, mantener los seis minutos por kilómetro se convirtió en todo un calvario. Caminaba en cada área de avituallamiento tirándome hielo y agua por encima y bebiendo todo líquido que pillaba (vaya si amorticé mi cuota de inscripción). Al final cruce la línea de meta en 5 horas 30 minutos y 52 segundos con una media en la carrera de 6'20"/km y di por cumplido mi objetivo de 5 horas y media (redondeando los 52 segundos a la baja, claro).

Saludos a todos y nos vemos en el agua, Carlos Hevia (a.k.a. El Guiri).
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Las Anclas y Lugones se unen…

Travesía: Santa María del Mar-Salinas

, a los pocos días, este recibe otro sms de contestación y le responde que… "estas loco, pero estaría genial", y pregunta… "¿cuantos metros son?", respuesta… "que más da, nos ponemos a nadar y cuando lleguemos, llegamos. Lo podemos hacer con vistas a organizar una Travesía de una distancia ya considerable en el Concejo de Castrillón, que no existe, pero primero se tiene que mirar si es posible, y claro, hay que probar".
La idea se va fraguando y se ponen a trabajar sobre ella. Se habla con el Coordinador de Salvamento de las playas de Castrillón, quien da unos consejos muy bien recibidos, pues no saben que tipo de corrientes pueden encontrarse por fuera, e incluso se ofrece para ayudar mientras vigilan las playas.
Se miden distancias y se calcula el tiempo que se tardaría en realizar, muy fácil sobre el papel o en el ordenador, pero hay que contar con muchos factores a la hora de desarrollar el proyecto, el día, el oleaje, la temperatura y el tiempo de estancia en el agua, seguir el camino sin salirse de el…, un sin fin de cosas que van surgiendo sobre la marcha, pero la idea va cogiendo su forma. Ahora solamente les queda poner una fecha en la que las condiciones meteorológicas les permitan tirarse al agua a esos dos locos, y hasta que esa aparece, van organizando la parte logística, que al final es una piragua de apoyo tripulada por un amigo por si las moscas.
Día 27 de septiembre, se llaman, "¡oye!, para este fin de semana dan bueno con olas por debajo de 1 m… ¿que?, pues venga pues a ello". Comienzan a preparar todo y empiezan los comentarios y cagaleras… "hay que tener cuidado con La Ladrona, tenemos que separarnos de ella, mi abuelo siempre me dijo que era muy peligrosa y que había corrientes traicioneras"…, "¿y si nos pica una medusa?, lo tenemos chungo, no hay salida, son todo acantilados hasta Arnao y el de la piragua va a su ritmo, y no se puede dejar a uno solo en el agua"…, "no se no se… pero que no, que ya no hay medusas el agua esta fría"…, ¿si nos da un calambre?, pues nos cogemos a la piragua y a estirar"…, "no seas cagón, con 2 cojo… y palante como los de Alicante"…, ¿a que hora quedamos?… a las 11:30 h. del sábado en Salinas pa ir en coche".

Llegó el sábado día 1 de octubre de 2011, el Club Natación Las Anclas y el Club Natación Lugones se unen ese día para realizar el proyecto, bautizado como "Samamarsal", que tenían en mente y no pudo haber mejor día, un sol que quemaba, despejado, ni una gota de viento… las condiciones ideales para realizar la travesía.
Esperan al piragüista y se montan en la furgoneta para ir hacía Santa María del Mar, allí se prepara todo, bañadores, gorro, gafas, vaselina, piragua, remo, cámara de vídeo, etc… y se hacen las fotos de rigor para que quede constancia y comienzan los comentarios y expresiones típicas… "¡me cagún en… que fría está!", "¡que cortaaa…!", "¡ya ya ya…!", y… llegó el momento, se ponen a nadar y ya no paran. La gente que se estaba bañando decía… "¿pero que hacen, a donde van?… para Salinas,… pero hay un montón, a ver si les pasa algo".
Desde el primer momento decidieron que nadarían juntos en paralelo y a buen ritmo y así fue, calcularon que tardarían alrededor de 1 hora, pero la verdad que les sobró tiempo por que el mar quiso que lo hiciesen tranquilamente sin impedirles su avance. Fue una travesía genial, una pasada, el tiempo acompañó, el agua con corrientes frías y templadas, las gaviotas volando y nadando al lado, el fondo se veía perfectamente y la costa desde el agua cambia un montón, aunque esta vez el sol les pegaba en la cara y tenían que parar para disfrutar de ella y preguntarse el uno al otro como iban. Se cambiaban las posiciones gastándose bromas… "déjame ir a mi por dentro, a si, si viene un bicho te come a ti primero"…, "cuidado con el calamar gigante de la fabrica de Arnao"…, etc… ellos se reían, pero menos mal que no vieron ninguna sombra por debajo, si no, quien los vería correr, bueno, nadar a toda leche, yo creo que más bien era pa quitar tensión…
Hicieron la Travesía muy bien, la distancia ronda alrededor de los 3.000 metros, un poquito más, y se plantaron en la Playa de Salinas en 45 minutos y a ritmo tranquilo.
Después de esta aventura, podemos decir que es una Travesía atractiva y realizable, se puede organizar siempre y cuando el tiempo y el mar lo permitan y contando siempre con las autoridades de Castrillón en colaboración con el Gran Club que tienen en su Concejo, el Club Natación Las Anclas, a quien desde aquí animamos para que en el próximo año la plantee como complemento a la de Arnao-Salinas y se pueda llevar a cabo, eso si… cuando el agua esté un poco más calentita.

¡Suerte y a por ello!.
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Solo un Asturiano en Lanzarote… Yeri
Travesía: Lanzarote-La Graciosa

Desde el principio, la travesía tuvo muy buena pinta. El jueves, dos días antes de la prueba, me llamaron de la organización para preguntarme, por mi condición de discapacitado, si necesitaba algún tipo de ayuda especial. Por si no lo sabéis, la travesía es Lanzarote-La Graciosa. En ese sentido. Pero todos los actos tienen lugar  en la isla de La Graciosa, por lo que para tomar la salida hay que subirse a un barco fletado por la organización que lleva a todos los participantes hasta unos 100 metros de la salida, una playa de la isla de Lanzarote. Los nadadores se tiran del barco en una de las imágenes más espectaculares de la travesía y acceden a la orilla nadando., preparándose para la salida. Por mi condición de discapacitado no puedo tirarme desde la altura del barco, por eso me llamaban, ofreciéndome la posibilidad de acceder a la cala en una zodiac aparte. Una pena perderme el momento del salto del barco. Pero no había otra opción. Además, como viajaba desde Asturias, me consultaron si tenía claras todas las condiciones previas, el programa de la prueba, la recogida de gorro y chip. En fin, un lujo.
Al día siguiente viernes, la bolsa del nadador: gorro, pulsera, chip y camiseta. Y el sábado la travesía. Empieza lo bueno.
Desde el principio me sentí muy arropado, y eso que iba completamente sólo. En cuanto me presenté a la organización para concretar el traslado a la salida en la zodiac se repitió varias veces la pregunta: “¿Tú eres el asturiano?”. Un gran ambiente entre los nadadores, desfile de banderas en honor de los participantes, con bandera asturiana incluida, y calentamiento colectivo en la explanada del muelle al ritmo que marcaba una monitora de aeróbic. Traslado a la orilla, con el saludo cómplice de cuánta gente se enteraba de mi origen astur, y salida de la travesía.
El recorrido cruza, como dije antes, las dos islas en línea más o menos recta según el camino que marcan 13 boyas separadas cada 200 m. En total, 2600 m. Fiel a mi estilo, salí el último de 629 nadadores. Y con  un buen ritmo fui adelantando nadadores. Me sentía muy fuerte, e iba quemando boyas: 1, 2, 3…cuando iba llegando a la 7ª vi a un grupo bastante numeroso de nadadores y pensé…” a ver qué hago para meterme ahí en medio…me van a dar por todos lados”…y de repente…se acabó….las boyas desaparecieron, los nadadores desaparecieron…dejé de ver a nadie…y me encontré nadando sólo…pero sólo…sólo…no veía boyas, ni gente, ni nada…pero seguí..y seguí…hasta que entonces vi las boyas…y no estaban lejos, no…ESTABAN A TOMAR POR CULO!!!!!!!!....joder…pero lejísimos!!!!...”pero si antes las tenía al lado!!!”..y empecé a nadar hacia las boyas…pero siempre estaban lejísimos…así que miré a la meta…y estaba A TOMAR POR CULO!!!!!...y eso a pesar que me parecía que llevaba nadando como unos 30 minutos..por el camino adelanté varios nadadores, en particular una que me llamó la atención porque llevaba un autric…seguí y seguí…y buscaba las boyas..pero siempre estaban igual de lejos…y la meta…siempre igual…pero aún así seguí…y volví a adelantar a la del autric…”pero cuándo me ha adelantado??”…me paró una barca a preguntarme si estaba bien con unos 8 nadadores subidos en ella…y la verdad que no iba cansado…así que les dije que seguía “con esta corriente no vas a llegar” me dijeron…”hostia, las corrientes!!!”…la verdad que ya me habían avisado…que era la dificultad de la travesía…pero seguí…y joder…otra vez que me encuentro a la del autric..y de repente…una barca me para y me dice “se acabó..no puedes seguir nadando…llevas 1h 40 minutos de travesía y una hora nadando en círculos”…así que me paro obligado por la organización y aparece un barco de la Guardia Civil costera con un mogollón de nadadores subidos…muchísimos…la gente me gritaba que subiera..que era imposible nadar…que llevábamos una hora nadando en círculos…”, subo porque me obligáis, eh??”…les dije…pero la verdad que no había manera…me subí al barco y nos pasaron las corrientes…y al que quería le dejaban saltar otra vez para entrar por la meta..yo salté y entré… la gente aplaudía un huevo… llegué… con el bañador hecho una basurilla y pedí que me hicieran la foto…se puede ver el tiempo de llegada... dos horas!!... y la gente por detrás entrando detrás de mí…
En resumen, un infierno de travesía…fue durísima…pero preciosa…una auténtica pasada por todo: ambiente, una organización de 10, dura, bonita…
Al día siguiente los periódicos decían que había sido la más dura de la historia y según datos de la organización, se recogieron a 429 nadadores!!!!!!!!!!!!....el 75% de la inscripción…la verdad que era imposible….pero el año que viene allí estaré de nuevo..podéis estar seguros…

Yeri.